Octubre se tiñe de fe: el Cristo de Pachacamilla viste de morado al Perú

¿Qué se celebra en el mes de octubre en Perú?
Durante el mes de octubre, en todo el territorio peruano, se celebra con gran fervor religioso al Señor de los Milagros, también conocido como el Cristo de Pachacamilla o el Cristo Morado. Esta es una de las manifestaciones de fe más importantes y multitudinarias del país. Durante este mes, miles de personas —de todas las edades, condiciones sociales y razas— se visten de morado para rendir homenaje al Cristo crucificado, elevando oraciones, rogativas y pedidos de milagros, especialmente por la salud y bienestar de sus seres queridos.
La devoción hacia el Señor de los Milagros tiene sus orígenes en el siglo XVII. En el año 1651, un esclavo angoleño llamado Pedro Dalcón pintó la imagen de Cristo crucificado en uno de los muros de una casa-huerta ubicada en el barrio de Pachacamilla, cerca del centro de Lima. Esta propiedad pertenecía a Diego Tebes Manrique de Lara, y el mural fue realizado como un acto de fe en medio de una época marcada por la peste de la fiebre amarilla, que diezmaba la población limeña.
Lo sorprendente fue que, a pesar del paso del tiempo y de diversos intentos por destruirla, la imagen permaneció milagrosamente intacta. Uno de los hechos más asombrosos ocurrió el 13 de noviembre de 1655, cuando un violento terremoto de magnitud 7.8 sacudió Lima, derribando casas y templos. Sin embargo, el muro con la imagen de Cristo no sufrió ningún daño, lo que fue interpretado por muchos como una señal divina. Años después, en 1687, otro gran sismo devastó nuevamente la ciudad, y una vez más, el mural quedó completamente indemne, lo que afianzó aún más la fe del pueblo y aumentó la devoción al Cristo de Pachacamilla.
Cerca de dos décadas después del primer milagro, un vecino del barrio llamado Andrés de León construyó un techo y una base de adobe para proteger el muro y colocar velas. Él mismo fue testigo de un milagro, al ser curado de una grave enfermedad, lo que lo convirtió en uno de los primeros grandes devotos del Señor de los Milagros. A partir de entonces, el culto fue creciendo progresivamente.
En cierto momento, las autoridades intentaron borrar la imagen alegando que el comportamiento de los fieles no era suficientemente acorde con los preceptos religiosos de la época. Sin embargo, todos los intentos por eliminarla fracasaron inexplicablemente, lo cual fue visto como otra señal divina que reafirmó la santidad de la imagen.
Actualmente, el mural original se conserva en el altar mayor del Santuario de Las Nazarenas, en Lima, y cada octubre miles de fieles participan en multitudinarias procesiones por las calles de la capital, en un mar de color morado, incienso y cánticos religiosos. Esta tradición se ha convertido no solo en un acto de fe, sino también en una de las expresiones culturales y espirituales más profundas del Perú.
¿Cuándo se viste de morado el Perú?
El Perú se viste de morado durante el mes de octubre para rendir homenaje al Señor de los Milagros, considerado el patrono del catolicismo en nuestro país. Esta venerada imagen es la más representativa de la fe popular peruana y sale en procesión desde el año 1687, recorriendo las calles de Lima. El día central de esta celebración religiosa es el 18 de octubre, cuando miles de fieles acompañan la imagen del Cristo Morado en una de las manifestaciones de fe más grandes del mundo.
El uso del color morado tiene un profundo significado en esta tradición. Fueron los esclavos africanos que residían en el Perú colonial quienes adoptaron este color como símbolo de penitencia y devoción hacia el Cristo crucificado. Con el tiempo, el morado se convirtió en el color oficial de esta festividad y también fue incorporado por la Iglesia para las liturgias propias del mes de octubre, asociándolo con la humildad, la fe y el recogimiento espiritual.
La imagen que actualmente sale en procesión representa al Cristo crucificado pintado sobre un muro, una obra milagrosamente conservada a pesar de terremotos y otros desastres. Se dice que Sebastián Antuñano, gran devoto del Señor de los Milagros, encargo una copia al óleo, de esta imagen, la cual fue llevada en andas por las calles del antiguo barrio de Pachacamilla, visitando hospitales, casas y a los enfermos, lo que dio inicio a la tradición procesional que continúa hasta nuestros días.
El hábito morado que utilizan los fieles durante las procesiones tiene su origen en el año 1687, cuando la religiosa Antonia Lucía del Espíritu Santo, más conocida como Antonia Lucía Maldonado, fundó el Beaterio de las Nazarenas. Las beatas de esta comunidad adoptaron el color morado como parte de su vestimenta en honor al Cristo de Pachacamilla. Desde entonces, este hábito ha sido mantenido por generaciones de fieles, convirtiéndose en un símbolo visible de devoción, penitencia y amor por el Señor de los Milagros.
¿Quiénes acompañan al Señor de los Milagros durante el recorrido?
A lo largo de todo su recorrido procesional, al Señor de los Milagros lo acompaña la Virgen María, representada en esta ocasión por la Virgen de la Nube. Esta advocación mariana se basa en una pintura de 1696, donde la Virgen aparece representada como una reina, con el Niño Jesús en su brazo izquierdo y un cetro en su mano derecha, símbolo de su poder y realeza celestial.
La Virgen de la Nube es especialmente venerada en Ecuador, ya que, según la tradición, se apareció en forma de una nube ante los fieles después de haber curado milagrosamente al obispo de Quito, monseñor Sancho de Andrade y Figueroa, quien padecía una grave enfermedad. Desde entonces, su imagen ha sido un símbolo de fe, esperanza y consuelo para los devotos.
Durante el recorrido del Cristo de Pachacamilla también están presentes las sahumadoras, mujeres devotas que purifican el camino del Señor con el humo del sahumerio que portan en pebeteros. Algunas de ellas caminan descalzas como acto de penitencia, y lo hacen de espaldas a la imagen del Cristo Morado como un gesto de profundo respeto. Visten hábito morado y mantilla blanca, distintivos tradicionales de su devoción.
La labor de cargar el anda del Señor de los Milagros recae en las cuadrillas de la Hermandad del Cristo de Pachacamilla. La primera de estas cuadrillas se formó entre finales del siglo XVII y comienzos del siglo XVIII. Fue el Virrey Manuel de Amat y Juniet quien organizó oficialmente las primeras cuadrillas de cargadores, estableciendo así las bases para la conformación de la Hermandad del Señor de los Milagros, que hasta hoy mantiene viva esta importante manifestación de fe.
¿Como son las procesiones en Perú?
Las procesiones en el Perú constituyen una expresión profunda del fervor religioso, cultural e histórico del pueblo peruano. Durante estas manifestaciones, las imágenes sagradas del catolicismo recorren las calles acompañadas por multitudes de fieles que demuestran su devoción con cánticos, oraciones, flores e incienso.
Una de las procesiones más representativas y multitudinarias del país —y de toda América Latina— es la del Señor de los Milagros, también conocido como el Cristo de Pachacamilla. Esta imagen, pintada originalmente en un muro por un esclavo angoleño en el siglo XVII, es venerada no solo en Lima, sino en todo el Perú y también en el extranjero. En la capital, cada octubre, miles de personas, vestidas con hábitos morados, acompañan la imagen en su recorrido por las calles del centro histórico. La devoción es tan extendida que existen hermandades del Señor de los Milagros en distintas partes del mundo, formadas por peruanos residentes en el exterior. En el año 2005, esta imagen fue declarada Patrón de los peruanos residentes e inmigrantes, y su festividad fue reconocida oficialmente como Patrimonio Cultural del Perú.
Las procesiones en el Perú varían según la región y reflejan una rica mezcla de tradiciones católicas y costumbres ancestrales. En ciudades como Lima y Ayacucho, los fieles adornan los balcones con flores, mantas y símbolos religiosos, mientras que el recorrido de las imágenes se realiza sobre coloridas alfombras florales preparadas especialmente para la ocasión. En las provincias andinas, estas celebraciones se enriquecen con elementos de las culturas prehispánicas, fusionando así la herencia indígena con la religión traída por los españoles.
¿Qué bebida y que postres se acostumbra a consumir en octubre?
En el mes de octubre, conocido como el Mes Morado en todo el Perú, es tradición disfrutar de una variedad de dulces y bebidas típicas que forman parte de nuestra rica herencia cultural. Entre ellos destaca la chicha morada, una refrescante y deliciosa bebida elaborada a base de maíz morado, especias y frutas como piña y manzana.
Otro infaltable en estas fechas es el tradicional turrón de Doña Pepa, un dulce emblemático que se caracteriza por su textura crujiente, su generosa capa de miel y su colorida decoración con confituras y frutos secos. También son muy populares los picarones, un postre con más de 200 años de historia, cuya forma recuerda a las donas, pero elaborados con una masa a base de camote y zapallo, fritos y servidos bañados en una dulce miel de chancaca.
Finalmente, no puede faltar la exquisita mazamorra morada, un postre preparado igualmente con maíz morado, al que se le añade frutas deshidratadas, pasas, ciruelas y un delicado toque de canela, que realza su sabor y aroma característicos.
Recorrido de la procesión del Señor de los Milagros 2025
Después de 22 años de ausencia, la sagrada imagen del Señor de los Milagros regresa al Callao, despertando gran emoción y fervor entre los fieles chalacos. En esta ocasión especial, la venerada imagen será trasladada en el Nazareno Móvil, un vehículo acondicionado especialmente para su recorrido procesional, permitiendo así que miles de devotos puedan acompañarlo en su andar por las calles del primer puerto.
El esperado retorno del Señor de los Milagros, comenzó el sábado 4 de octubre, fecha en la que se llevó a cabo su primera salida procesional. La segunda jornada está programada para el sabado 18 de octubre, mientras que las siguientes procesiones se realizarán el domingo 19, el martes 28 de octubre y, finalmente, el viernes 1 de noviembre.
Cada una de estas fechas representa una oportunidad única para renovar la fe, expresar agradecimiento y vivir de cerca una de las manifestaciones religiosas más importantes y emotivas del país.
FUENTES
UTP Universidad Tecnologica del Perú
TVPERU
LA REPUBLICA
EL COMERCIO
ANDINA Agencia peruana de noticias